La Comunidad del Caribe (CARICOM) busca hoy Georgetown las vías para imprimir un impulso definitivo al proyectado Mercado y Economía Únicos (CSME) que facilitará la libre circulación de bienes, mano de obra y personas en toda la región.
El tema ocupa el centro de una reunión del Consejo de Comercio y Desarrollo Económico de esa agrupación, integrado por los ministros del ramo de los 15 países miembros.
En el encuentro, el secretario general del grupo regional, Irwin La Rocque, advirtió que pese a algunos avances registrados en esa dirección “todavía queda mucho por hacer en algunos puntos específicos.”
El funcionario recordó que los gobiernos adoptaron un plan sobre las cuestiones principales vinculadas al CSME que incluye las decisiones aprobadas al respecto, los compromisos asumidos y un cronograma.
En ese sentido, dijo que una reciente reunión de revisión del proyecto evidenció la falta de un efectivo sistema de consultas en los niveles nacional y regional con el consecuente impacto negativo sobre la toma de decisiones y la implementación del plan.
El éxito del CSME dependerá de la completa implementación de medidas que beneficien a los estados miembros y sus pueblos, subrayó al insistir en la necesidad de progresos en las negociaciones hacia la materialización del proyecto. La Rocque informó que los resultados del proceso de discusiones serán analizados en la próxima cumbre de la agrupación dentro de dos meses.
CARICOM se fundó en 1973 mediante el Tratado de Chaguaramas y está integrada por 15 naciones y dependencias británicas.
Los miembros plenos son Antigua y Barbuda, Barbados, Belice, Dominica, Granada, Guyana, Jamaica, Montserrat, San Cristóbal y Nieves, Santa Lucía, San Vicente y las Granadinas, Trinidad y Tobago mientras que las Islas Vírgenes británicas, las Islas Turcas y Caicos son miembros asociados.
En calidad de observadores también particioan Aruba, Colombia, Curazao, México, Puerto Rico, República Dominicana, San Martín y Venezuela.
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