SECCIÓN: Por las Calles de Morón (69)
Seguramente contra su voluntad y saltando su petición de pocos elogios inmerecidos a su criterio, nos sometemos a calificar a nuestra entrevistada de hoy, Elízabeth Iparraguirre Jorge, como "la Reina de la Radio en Morón".
No resultó tarea fácil acceder a las respuestas que pretendíamos obtener, pues una y otra vez, Elízabeth insistía en que hay otras muchas mujeres de trayectoria más relevantes que debían antecederla.
Sin derecho a abrir el blog de notas y mucho menos a desenfundar el lapicero, se refiere a sus problemas de salud, a turnos médicos, radiografías, remisiones y reflexiones de especialistas, también a otros problemas familiares que la llenan de preocupaciones en los últimos tiempos, "sin embargo, -alega- me siento bien".
Con pocas oportunidades para preguntar, comenzó a recordar sus vivencias en la radio, donde se convirtió en la primera voz femenina de la emisora local, anécdotas increíbles y también tristes episodios que vivió dentro de las cuatro paredes de la cabina de locución, como el profundo dolor que le provocó el fallecimiento de su padre, y sin poder contener los sentimientos cuando pudo reincorporarse al trabajo, lo hacía con una toalla sobre sus muslos, para secarse las lágrimas, cuando cerraban el micrófono.
Detalla los constantes consejos que ofrecía a los locutores más noveles, regaños educativos que luego fueron agradeciendo con el paso del tiempo.
Pero Elízabeth Iparraguirre durante mucho tiempo simultaneó la locución con las tareas que desempeñaba como miembro del Secretariado Provincial de la CTC, responsabilidad que implicaba tareas fuertes y consecutivas.
Aún con su melodiosa voz, hace una retrospectiva, para recordar que con 15 años de edad comenzó a trabajar como operadora de teletipos y más tarde como Jefa de Tráfico en el Correo de Morón, por un término de diez años.
De allí nos transporta hasta los Talleres Ferroviarios donde laboró como Técnica de Normación de los Sistemas de Pagos, donde se mantuvo hasta 1975. Fue entonces cuando comenzó a vincularse con Radio Morón.
Precisa Elízabeth que siendo aún trabajadora ferroviaria, realizaba como locutora un programa dedicado a la mujer, de forma voluntaria.
Elízabeth se incorpora a la plantilla fija de la emisora el primero de enero de 1984. donde se mantuvo hasta el 2008, cuando se acogió a la jubilación.
Reconocimientos?. Muchos, desde Hija Distinguida de la Provincia de Ciego de Ávila, hasta el Micrófono de la Radio Cubana, sin descontar otros como un reconocimiento otorgado por el Comité Provincial del Partido, denominado En Honor a la Palabra y otras muchas distinciones.
Elizabeth no se explica cómo pudo concretar está trayectoria, pues fue una niña demasiado tímida, Guajirita de monte adentro, de un lugar llamado Las Vegas, en Chambas, que carecía de maldad, que le daba pena hablar, y que se entretenía dándole vuelta a los botones de su uniforme escolar hasta desprenderse de la tela, solo por un evidente nerviosismo.
Ya nos despedimos, luego de brindarnos café y de protestar por la insistencia de las fotos, pues se niega a todo tipo de propuesta que sea para resaltar su personalidad.
Creo, sinceramente, que esta Sección Por las Calles de Morón ha ganado una difícil batalla, y nada menos que con La Reina de la Radio en Morón.
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